martes, 17 de julio de 2007

Ford T. Sencillamente eso.


Sí, sencillamente eso, el primer vehículo más vendido por la historia de la humanidad solo superado por dos Volkswagen, el "Escarabajo" y el "Golf".

Vendió un total de aproximadamente 16 millones en una época en la cual la sociedad no podía permitirse comprar los lujosos coches de la época, los cuales eran obras artesanales los cuales se producían muy pocas unidades y con unos costos muy elevados que solo podían pagar los más ricos.
Y es ahí cuando entra en acción Henry Ford cuando introdujo 1 coche con motor de cuatro cilindros y 20 CV que alcanzaba una velocidad de 70 km/h y consumía un litro cada 5 km.

El Ford T era muy austero pero incluía grandes avances como el volante en el lado izquierdo que facilitaba la entrada y salida de los pasajeros o que el cárter y el cigüeñal estuvieran en un solo bloque.

Sin embargo no fue eso lo que impulsó las ventas del Ford T sino su atractivo precio y es que gracias al sistema de montaje en cadena o "fordismo" como empezó a llamarse a este tipo de montaje la "Ford Motor Company" pudo rebajar el precio de los iniciales 850 dólares hasta los 260 dólares.


Y es que la consigna de Henry Ford era que casi cualquiera pudiera adquirir el coche y aunque el primer prototipo se pintó de rojo y luego en verde, a partir de su fabricación en serie se optó por el negro ya que era el color que se secaba más rápido y así abarataba costes, de ahí la celebre frase de "Todo el mundo puede tener un Ford T del color que desee, siempre y cuando sea negro" pronunciada por Henry Ford.

Henry Ford aplicó ese sistema de producción copiandolo de los mataderos en los cuales se despiezaban los animales a la vez que iban arrastrandolo, y pensó que si cada trabajador se dedicase única y exclusivamente a colocar una parte del coche este se produciría más rápido, y efectivamente así fué ya que el tiempò de producción paso de 12 horas por vehículo a solo 90 minutos, así salía un T cada 10 segundos de cada día laborable.

Paradójicamente pero gracias a la disminución de costes los obreros de Ford cobraban 5 dolares diarios, una cifra superior a la media estadounidense de la época. La idea era que los propios trabajadores pudiesen comprase el coche.

Acaba de llegar el vehiculo al alcanze de todos.